Por: Belkis Niebla López
Los choferes de Transportes Escolares de Trinidad cambiaron sus pasajeros ante el rebrote de la COVID-19 en el municipio, pues los centros docentes recesaron debido a la problemática y la Base asume toda la transportación del territorio, según explico el director Alexis Reyes Medina.
El directivo afirmó además que realizan diariamente el traslado hacia Sancti Spíritus del personal de la Salud que labora en la provincia, con la ubicación de 2 ómnibus a las 6 de la mañana y el regreso a las 2 de la tarde, y también para los que se desempeñan en las zonas rurales y del plan turquino dentro del municipio; las rutas San Pedro, Caracusey y Condado, Manaca Iznaga y FNTA, actividad que se lleva a cabo de la misma forma se llevan en la mañana y se recogen en la tarde.
Reyes Medina refirió también que asumen la transportación de las villas de aislamiento en 2 funciones unos carros, preparados para la tarea porque tienen la cabina separada, que se encargan de recoger los contactos de casos positivos, y otros que trasladan las altas médicas hacia sus lugares de origen.
El director de la Base de Transportes Escolares de Trinidad dijo igualmente que tienen en función de la tarea un total de 26 ómnibus, todos en buen estado técnico, listos para trabajar, los que además de estar en función de la COVID-19 también realizan la transportación de los trabajadores que ejecutan la construcción de hoteles, los del Campamento Ismaelillo, así como de los jóvenes que cumplen su Servicio Militar haciendo pesquisajes y el traslado de la prensa. El desarrollo de la actividad le permite a la Base ingresos diarios de más de 8 mil pesos.
De igual forma señaló que un grupo de trabajadores permanecen en la Base dedicándose a hacer trabajo socialmente útil que incluye la limpieza del centro y la pintura del mismo a favor de la imagen, además del arreglo de los carros que lo precisan.
Reyes Medina añadió que se toman todas las medidas previstas por el Ministerio de Salud Pública ante la enfermedad, para lo cual está diseñado un sistema en que los carros encargados de trasladar a los posibles positivos, terminado su traslado, se tratan completamente con cloro, al igual que los que trasladan el resto del personal y están implementados los pasos podálicos, el uso obligatorio del nasobuco y el lavado frecuente de las manos.