Por: Alipio Martínez Romero
Culto digno y sensible del hombre, desde bases marxista-leninistas y con la mirada en las doctrinas martianas de honrar la patria con su conducta privada y pública, fue la firma del Código de Ética de los Cuadros de la República de Cuba en la Empresa Agroforestal Trinidad.
También esa convocatoria propia de la Revolución Socialista por su naturaleza popular y el carácter humano de sus estratégicos objetivos acentuó el pensamiento político-ético del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz y el General de Ejército Raúl Castro Ruz.
En ceremonia solemne ante el obelisco a los cinco mártires trinitarios del Movimiento Revolucionario 26 de Julio, se colocó una ofrenda floral como compromiso de cumplir los preceptos del referido Código de Ética en el proceso de continuidad con el ejemplo de quienes ofrendaron su sangres y la vida por el triunfo de nuestro proyecto declarado socialista hace 60 años por su máximo líder.
Asimismo el grupo de hombres y mujeres de la Empresa Agroforestal Trinidad al rubricar el documento hacían suyo los postulados del Comandante Ernesto Che Guevara, quien consideraba imprescindible el fortalecimiento de la conciencia, la vergüenza y la moral en la formación del Hombre nuevo, creador de los cimientos del tránsito del socialismo al comunismo.
Del mismo modo los firmantes acogieron como un reto las palabras expresadas por el primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez, sobre los cuadros durante la celebración del octavo congreso de la vanguardia de la clase obrera en la isla.
Tanto los cuadros y sus respectivas reservas abogaron por asumir en sus procederes el concepto de Revolución de Fidel , así como aplicar en la teoría y en la práctica el llamado del mandatario de la nación Díaz-Canel, de “pensar como país”,