
Las villas Blanca y Caribe del Sur perteneciente a la Empresa de Alojamiento en Trinidad, durante todo este tiempo de pandemia mantienen sus funciones garantizando los servicios de alojamiento, alimentación y limpieza de habitaciones y áreas verdes para constructores que ejecutan el Programa de Rehabilitación Hidráulica
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Por: Belkis Niebla López
Desde que el nuevo coronavirus se expandió por el mundo y llegó a Cuba, con los primeros casos detectados en este territorio sureño, la Empresa de Alojamiento en el municipio asumió otros huéspedes, unas villas se convirtieron en centros de aislamiento y otras como las nombradas Blanca y Caribe del Sur, recibieron a constructores que ejecutan el Programa de Rehabilitación Hidráulica de Trinidad.

Según explica el administrador de las dos unidades Oscar Sacerio Rodríguez, durante todo este tiempo los 29 trabajadores se mantienen en sus funciones garantizando los servicios de alojamiento, alimentación y limpieza de las habitaciones y áreas verdes y además tienen un punto de venta en Acopio con ofertas variadas en el horario de 7 y 30 de la mañana hasta la una de la tarde de lunes a domingo, prestaciones que permiten lograr ingresos que oscilan en más de 240 mil pesos mensualmente.
Sacerio Rodríguez afirmó también que en ambas villas se respetan los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud Pública a fin de preservar la vida de todos los trabajadores y de los huéspedes y evitar la propagación de la enfermedad, por eso se exige por el uso del nasobuco, el lavado constante de las manos, los pasos podálicos y el uso del hipoclorito de sodio y el cloro.

La Empresa de Alojamiento en Trinidad cuenta con un total de 13 villas, 10 de ellas ubicadas en la zona costera de La Boca, 1 en el poblado pesquero de Casilda, 1 en Rancho Consuelo y otra en Cabagán, las que mantienen la esperanza de una vez finalizada la COVID-19, reiniciar sus habituales servicios.