El titular del MINSAP recorrió varios centros donde se atienden pacientes positivos de la COVID-19 e informó de la llegada de otro contingente de profesionales de la Salud con 60 médicos generales integrales y diplomados en cuidados intensivos, además de insumos y tres posiciones de ventiladores pulmonares
Por: Ana Martha Panadés Rodríguez
Las acciones que el municipio de Trinidad implementa para el enfrentamiento a la COVID-19 carecen de la eficacia que requiere el complejo escenario epidemiológico del territorio, signado por la alta transmisión del virus, las deficiencias en la atención médica y las insatisfacciones de la población.
El diagnóstico lo certificó el ministro de Salud Pública, doctor José Ángel Portal Miranda durante una visita a la localidad sureña, que incluyó el recorrido a centros asistenciales para intercambiar con pacientes y personal sanitario.
“Tendrán toda la ayuda del país, pero los primeros que deben estar convencidos de cambiar la estrategia son los trinitarios; son las estructuras locales las que deben abordar el asunto. Hay cosas que andan mal y que conllevan a ese estado de insatisfacción de la población y que tiene que ver con la demora en la respuesta”, expresó el titular.
La mala organización de los recursos humanos –muy escasos en algunos servicios- el desconocimiento de los protocolos de atención a los enfermos, las violaciones de las normas de bioseguridad, demora en el traslado de los pacientes y su tratamiento, el colapso de las capacidades de ingreso, figuran entre los síntomas más graves del descontrol y que atentan contra la calidad en la atención médica.
Portal Miranda llegó hasta una de las consultas de IRA que funciona en el Policlínico Manuel de Jesús Lara Cantero, donde constató la lentitud del proceso para la realización de la prueba diagnóstica, situación que se repite en el resto de las áreas de salud del territorio y contribuye a la propagación del virus por la alta concentración de personas, la mayoría con síntomas.
En la Escuela de Hotelería y Turismo, donde funciona un hospital de campaña, reconoció la organización de los servicios al habilitarse allí 68 capacidades y un cubículo de terapia intensiva, con dos camas para pacientes graves.
En el Hospital Tomás Carrera Galiano constató la falta de posiciones para el ingreso de los enfermos que esperan varias horas en los pasillos de la institución y la tensión del personal sanitario –un médico a cargo de dos salas-, el abuso en la indicación de antibióticos y la falta de ropa sanitaria, imprescindible para la protección de los profesionales que se enfrentan al virus y merecieron los elogios de los trinitarios.
El ministro de Salud Pública, acompañado de las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en la provincia y el municipio, auscultó las insatisfacciones del pueblo en lo referido a la atención primaria de salud; para ganar esta batalla recomendó revolucionar la labor de los grupos de trabajo comunitario como brazo derecho de los médicos y enfermeros de la familia.
Con el propósito de aliviar el agobio de la red asistencial, en las conclusiones de la visita trascendió que otro contingente de profesionales de la salud llegará en las próximas horas a la provincia y el sureño territorio, integrado por 60 médicos generales integrales y diplomados en cuidados intensivos, además de insumos y tres posiciones de ventiladores pulmonares.
José Ángel Portal Miranda insistió en la urgencia de avanzar en el proceso de inmunización masiva con la vacuna Abdala, como una de las acciones que podrá contener la alta transmisión del virus, además de otras recomendaciones en función de la preparación del personal sanitario, la comunicación, la reorganización de los servicios y el apoyo de todos los integrantes del grupo Temporal de Trabajo, porque “juntos hay que cambiar el rumbo a la pandemia en Trinidad.”