Muchos le conocen sencillamente como Mirador del Valle; otros lo distinguen como el Balcón del Valle de los Ingenios, Patrimonio Cultural de la Humanidad
Por: Oscar Alfonso Sosa
Pero en lo que todos coinciden es en que es un sitio desde donde puede contemplar la belleza natural de lo que fueron plantaciones cañeras y que contiene restos arqueológicos y arquitectónicos de la época colonial.
Además del escenario que deja ver a quienes le visitan, el Mirador del Valle tiene otro atractivo singular: un canopy tour, una aventura atrevida y singular.
Su longitud es de unos 1200 metros de largo, con un último tramo de 350 m, siendo este el de mayor expectativa.
El canopy cuenta con 10 plataformas para 5 saltos. El producto clasifica como sendero con tramo aéreo «y mucha adrenalina», también es considerado como una aventura, donde el cliente podrá disfrutar de una experiencia sin igual en la región central de Cuba.
(Tomado de Radio Sancti Spíritus).