17 de enero de 1957: combate de La Plata, primera victoria del Ejército Rebelde

El 17 de enero de 1957 se desarrolló el combate de La Plata, considerado la primera victoria del Ejército Rebelde con el que se inició la ofensiva contra el enemigo

Por: Rafael Novoa Pupo

Después del encuentro de Fidel y Raúl en Cinco Palmas el 18 de diciembre de 1956, el Ejército Rebelde comenzó su fortalecimiento y ya para los primeros días de enero había aumentado el número de guerrilleros a treinta y a veinticuatro el de las armas. Fue entonces el momento oportuno para iniciar la ofensiva contra el enemigo.

Se escogió para ello un pequeño cuartelito ubicado en las proximidades del Río La Plata, con una guarnición de cinco soldados y cinco marineros bien armados, al mando de un sargento. Concebido el plan de ataque por la guerrilla, que se dividió en cuatro grupos, sobre las dos de la madrugada una ráfaga de ametralladora disparada por Fidel marcó el inicio del combate, que se prolongó por unos 40 minutos, al ofrecer los soldados y marineros una resistencia inesperada, pero finalmente fueron derrotados.

A las cuatro y treinta de la madrugada del 17 de enero de 1957 el pequeño núcleo guerrillero se retiraba del escenario del combate en La Plata, adentrándose en lo más abrupto de la Sierra Maestra, pero antes dejó en libertad a los prisioneros y entregó toda la medicina disponible para los heridos, algo que se convirtió en una práctica habitual durante el curso de la guerra.

Aunque desde el punto de vista militar el combate tuvo poca importancia, las Fuerzas Armadas del régimen se vieron obligadas a reconocer que Fidel Castro comandaba un grupo dispuesto a enfrentárseles, y echó por tierra la propaganda de que todos habían sido aniquilados en Alegría de Pío.

Si bien la toma del cuartel de La Plata se convirtió en la primera victoria del ejército rebelde, esta acción puso en conocimientos de la población cubana el hecho de que Fidel estaba vivo, y no muerto como había asegurado la dictadura y que la guerrilla existía, para convertir en realidad el propósito de ser libres o mártires. (Con información de ICRT Santiago de Cuba, Contraloría General y periódico Granma).