La ceremonia de la coronación se llevó a cabo este sábado en la Abadía de Westminster, Londres, en presencia de la familia real y de miles de invitados, y bajo un operativo de seguridad a gran escala
Organización Mundial de la Salud declara fin de emergencia sanitaria mundial por COVID-19 China urge mesura tras reporte sobre ataque de drones ucranianos a Rusia Papa Francisco destaca valor del diálogo interreligioso con el islam Anuncia Chile contactos con Perú y Venezuela sobre crisis migratoria Presidente de Siria recibe a su homólogo iraní en histórica visita
Carlos III, de 74 años, fue coronado este sábado en la Abadía de Westminster, en una fastuosa y solemne ceremonia en Londres, evento inédito en el Reino Unido desde hace 70 años. El acto tuvo lugar ocho meses después de su llegada al trono tras la muerte de su madre Isabel II, reporta DW.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, puso la corona de San Eduardo sobre la cabeza del rey ante unos 2 300 invitados, entre ellos un centenar de jefes de Estado extranjeros, como Luiz Inácio Lula da Silva y los reyes de España, Felipe VI y Letizia.
También asiste el vicepresidente de la República de Cuba, Salvador Valdés Mesa, quien llegó a Londres este viernes al frente de una delegación cubana, según informó el sitio de la Cancillería de la Isla.
Tras colocarle la corona, el arzobispo gritó a la congregación «Dios salve al Rey», tras lo cual se escucharon trompetas. La esposa de Carlos III, Camila fue coronada inmediatamente después de un modo similar pero más sencillo.
Sentado en la silla de roble de San Eduardo, considerado el mueble más antiguo del Reino Unido y colocado sobre un piso de mosaico medieval, Carlos III fue coronado tras recibir las distintas insignias reales, que simbolizan las responsabilidades como el jefe de Estado británico hasta el día de su muerte.
Al rey se le entregó el orbe del soberano, que simboliza el mundo; el cetro con cruz, que representa el mundo cristiano; y el cetro de la paloma, símbolo del papel espiritual del monarca.
Por último, Welby le colocó la corona de San Eduardo, hecha en oro y decorada con rubíes, amatistas, zafiros, granate y topacios, la única vez en su vida que el monarca la llevará.
Acompañados por miles de militares y miembros de la realeza, los monarcas regresarán en una nueva procesión al Palacio de Buckingham, donde acompañados por su familia saludarán a la multitud desde el balcón.
La ceremonia de la monarquía, cuya tradición inició en su momento el rey Guillermo el Conquistador, constituye una presentación internacional al nivel diplomático de estimada trascendencia para Londres, comenta aquí la televisión en esta urbe, reseñó desde Londres, Prensa Latina.
Aunque sin llegar a la fastuosidad demostrada por la coronación en 1953 de la reina Isabel II, quien falleció en septiembre de 2022, a los 96 años de edad, la coronación constituye un espectáculo atractivo, donde participan unos 100 jefes de Estado, constató la prensa.
No obstante, no todos los británicos están felices con la histórica coronación. En este marco, la policía arrestó a varias personas que participaban en una protesta del grupo antimonárquico Republic, entre ellos al líder de la organización, Graham Smith.
Otros miembros de la organización fueron retenidos en circunstancias similares, mientras reunían pancartas, refiere el sitio DW.
La detención se produjo hacia las 7:30 hora local, cuando cientos de manifestantes antimonárquicos se habían reunido en la plaza de Trafalgar con banderas y camisetas amarillas para destacar su oposición a la coronación del monarca.
El grupo Republic reclama la abolición de la monarquía hereditaria en Gran Bretaña y la elección de un jefe de Estado en forma democrática.
Los republicanos siguen siendo minoritarios en el Reino Unido, pero se han hecho más visibles desde la muerte de la popular Isabel II en septiembre.
El primer ministro británico, Rishi Sunak, ordenó el empleo de unos 20 mil policías y agentes de seguridad para garantizar la tranquilidad, incluidos 11 mil directamente involucrados en la custodia de la coronación, señaló el diario The Guardian.
Sunak enfrenta desde hace varias semanas jornadas de huelgas de varios sectores del servicio público, incluido el ferroviario y el de salud, en demanda de subida de salarios, ante el alza de los energéticos y el deterioro de las condiciones de vida de miles de británicos. (Agencias).