Talleristas, investigadores y exalumnos de instituciones académicas alemanas dieron inicio a la Escuela de verano Formación Profesional Inicial y Continua en el Mundo-Cooperación Internacional y Sur-Sur Norte Asociación para la Innovación
Por: José Lázaro Peña
El Hotel Plaza, de Sancti Spíritus, acogió durante la jornada de este lunes a profesionales de 19 naciones de naciones de todo el planeta en el tercer encuentro temático sobre formación profesional ocupacional-profesional inicial y continua a nivel mundial.
Auspiciado por el DAAD (Servicio Alemán para el Intercambio Académico) para la cooperación de Exalumnos de Instituciones Académicas Alemanas y apoyado por la Universidad de Sancti Spíritus José Martí Pérez, este evento espera que la implementación de la medida propuesta tenga un efecto de transferencia más allá de Cuba, puesto que la experiencia acumulada de la nación en innovaciones en educación y capacitación será de interés para otros países del sur global.
“Cuba tiene décadas de experiencia en cooperación internacional e intercambio científico con países en desarrollo, como Egipto, y ha ayudado a mi país durante décadas, especialmente en la salud. Pienso que llegó la hora de agradecer y devolver estos esfuerzos”, manifestó el Dr. Mohammed Abdel-Rahman Ghorab.
La cooperación internacional es cada vez más prioritaria, en especial para los países emergentes y en desarrollo, puesto que el número de jóvenes que abandonan la escuela secundaria suele ser muy alto en estos países y las oportunidades de seguir un camino educativo directo a los estudios universitarios después de terminar la escuela son bastante bajas.
“Además, la economía de estas naciones depende de una mano de obra calificada y existe en ellas una alta tasa de creación de empleo y valor en la economía informal, que, al igual que el sector formal de la economía, también necesita una mejora en las habilidades laborales”, añadió Stefan Wolf, profesor de la Universidad Técnica de Berlín y organizador de este evento.
El éxito de la educación y formación profesional no debe reducirse a facilitar una colocación exitosa en el trabajo y el empleo, sino que, como componente de la educación en la adolescencia, debe apoyar el desarrollo positivo de la personalidad y la asunción exitosa de roles sociales. De esta manera cada Estado, empresa y escuela contribuirán a la cohesión e integración de las sociedades. (Tomado de Escambray).