Por: Ana Martha Panadés Rodríguez
El 25 de enero de 1963, Polo Viejo, un pequeño poblado de las montañas, se convirtió en un baluarte de resistencia y coraje. Más de 40 bandidos, dirigidos por Julio Emilio Carretero, uno de los más sanguinarios soldados del ejército de la tiranía batistiana, llegaron decididos a desactivar el estratégico lugar, a poco más de 30 kilómetros del municipio espirituano de Trinidad, y apropiarse de las armas del cuartel de las Milicias Nacionales Revolucionarias. Continuar leyendo «Julio del Sol: Polo Viejo no cayó en manos de los bandidos»