Por: Nuria Barbosa León
El país cuenta con cantidades suficientes de materia prima para asumir las producciones de 699 productos, la batalla es estabilizarlos la mayor parte del año en las farmacias, para generar tranquilidad y confianza en la población, afirmó Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político del Partido y vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, quien explicó a los diputados de la comisión de Salud y Deporte de la Asamblea Nacional, los esfuerzos realizados por la dirección del país para disminuir los niveles de faltantes de medicamentos.
Los esfuerzos giran en torno a brindar una cobertura mayor a los 30 días para aquellos prescriptos en farmacia en la tarjeta-control, previendo la existencia de algún enfermo que inicie por primera vez el tratamiento, algo en lo cual se ha avanzado. Pero la aspiración, dijo Morales Ojeda, es alcanzar los 120 días de cobertura para no incurrir en faltantes.
El Ministerio de Salud Pública y BioCubaFarma (encargada de la producción) han tomado un conjunto de medidas para lograr estos propósitos, como son la renegociación de los créditos, el incremento de los montos financieros para la compra de materias primas en el mercado internacional, y la reevaluación de la producción de fármacos, pues se puede retomar las producción de algunos renglones que se han estado importando.
Estas decisiones incluyen la capacitación de los trabajadores de la farmacia con cursos de nivel básico y medio para los dependientes, y de superior para
formar licenciados de la salud en la especialidad de farmacia. (Esta licenciatura existe en algunas universidades del país, pero su perfil es de mayor alcance y no para laborar en las unidades dispensariales).
Igualmente, reciben reparación y mantenimiento algunos locales, según planes anuales previstos por los gobiernos municipales, y se crean condiciones para crear redes digitales entre los establecimientos, como parte del programa de informatización de la sociedad, lo que facilitará la prescripción, pues permitirá saber cuáles son los medicamentos en existencia.
Potenciar la medicina natural y tradicional es otra de las líneas de trabajo, y para ello se amplían los conocimientos de los profesionales de la salud. Además, se propone que industrias de BioCubaFarma asuman una gama de estos productos naturales para ofertar en las farmacias.
El doctor Morales Ojeda insistió en que el amor y la ternura en el trato con el público no necesitan de insumos, y llamó a que los trabajadores de estas áreas pusieran mayores dosis de comprensión para entender las necesidades de quienes acuden a comprar un medicamento. «Es inadmisible que en la farmacia haya una amplia cola y una sola persona despachando en el mostrador», ejemplificó.
En Cuba hoy más de 3 300 900 personas reciben 85 medicinas por el denominado tarjetón, una muestra del impacto que tiene en el país cualquier afectación a esta área ya de por sí sensible, pues tiene que ver con la salud.
Convocó a los diputados a combatir las manifestaciones de indisciplinas e ilegalidades como la venta de fármacos de forma especulativa y pidió realizar un trabajo fuerte a nivel de comunidades. «Seremos implacables ante el desvío y el uso inadecuado de los medicamentos», sentenció. (Granma)