Por: Juan Carlos Naranjo.
El protagonismo del delegado en la base como líder aglutinador será tema recurrente en los intercambios que se organizan en las diferentes comunidades de Trinidad para celebrar los 45 años de creados en Cuba los órganos del Poder Popular.
Cuarenta y cinco años: Desde el pueblo y para el pueblo”, es el nombre de la Campaña que deviene momento de reflexión, juicio crítico y análisis para el constante perfeccionamiento de las prácticas del Poder Popular, un sistema que es la pieza angular de la democracia cubana.
Por eso en los encuentros en cada asentamiento, barrio, demarcación de Trinidad se insistirá en el fortalecimiento de la unidad en cada lugar, pues la pandemia ha afectado el funcionamiento integral de los órganos del Poder Popular, toda vez que en dos años no se han realizado las asambleas de rendición de cuenta del delegado a sus electores.
En tal sentido la Presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Trinidad, Tania Gutiérrez Fontanills y Diputada al cónclave nacional se refirió al proceso de rendición de cuenta programado en la provincia espirituana antes de finalizar el año.
“En el caso de nuestra provincia se va acometer el proceso del 15 de noviembre al 15 de diciembre por eso llamamos a la composición de trabajadores del Poder Popular a que se nos sumen de conjunto con los delegados, vamos a enfrentar un proceso de rendición de cuentas después de 2 años con un cúmulo de problemáticas, aun cuando se ha trabajado en la solución de planteamientos, hemos atravesado momentos muy difíciles donde la pandemia ha incrementado las dificultades.”
Y es que, al decir de la propia fuente, todos los miembros de los órganos del Poder Popular son servidores públicos y por eso se deben al pueblo y en función de ello en cada respuesta, en cada atención corresponde explicar, convencer cuando la solución del problema no está a la mano.
Los intercambios que se organizan en Trinidad por los 45 años del Poder Popular tienen la misión de revitalizar el papel de este órgano de gobierno con la participación ciudadana en la transformación de sus comunidades.
Es el mejor regalo a la Asamblea de Balance del Partido Comunista de Cuba en Trinidad, fijada para el 27 de noviembre, el octavo Congreso de los comunistas sureños.