Por: Joaquín Gómez Serra
La dupla del espirituano Serguey Torres y el cienfueguero Fernando Dayán Jorge demostraron en la primera parada de los campeonatos del mundo de canotaje de velocidad en la ciudad húngara de Szeged, que sus pretensiones de escalar el podio de la cita olímpica en Tokio 2021 están bien fundadas, y que el binomio de la canoa biplaza no es segundo de nadie en el orbe.
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Mientras el mundo, a pesar de la pandemia ha seguido su ritmo competitivo en el canotaje mundial, Serguey y Fernando Dayán sólo han entrenado en casa, y en sus cuarteles generales de la presa Hanabanilla y en la Coronela, ya que las bases de entrenamiento que iban a realizar se suspendieron ante el azote de la COVID 19.
Por eso, las medallas de plata y bronce del espirituano Serguey en el C-2 junto a Dayán, a la distancia de mil metros, y el oro del cienfueguero y la presea bronceada del yayabero en el C-1 a 5 mil metros, son una clarinada de cara a la cita de los cinco aros.
La dupla de Torres-Dayán se llevó la presea plateada en el C-2 a 1 000 metros con tiempo de 3:49.18 minutos, detrás del binomio alemán de Sebastian Brendel y Tim Hecker (3:48.27) y delante de los brasileños Isaquias Queiroz y Jacky Jamael Nascimento (3:50.75).
En la misma jornada dominical, y con una diferencia de sólo 3 horas, regresaron a la pista acuática húngara y levantaron boga en los cinco mil metros, pero del C-1, en lo que puede calificarse como una hombrada ante rivales de mucha valía internacional, y con muchas horas-aguas sobre sus canoas en este 2021, y con participación en lides internacionales y en bases de entrenamientos con la élite del mundo.
El C-1 a 5 000 metros, reservó el titulo para el cienfueguero Fernando Dayán con crono de 21:51.69 minutos, mientras Serguey obtenía bronce con 21:57.98. La plata fue para el húngaro Balazs Adolf (21:52.63).
Más que las preseas, de un valor incalculable, tras dos años sin competir al más alto nivel internacional, se cumplió el objetivo de reinsertar a este binomio a sólo dos meses en el nivel competitivo, en un momento donde Serguey-Fernando y su entrenador Yosniel Domínguez prácticamente no sabían ni cómo se movía el canotaje en el orbe, en cuanto a tiempos reales.
Para Cuba en general fue una excelente cosecha, no solo por las medallas, sino porque se trata de atletas que ya tienen el boleto a Japón. Además de las preseas de esta dupla, Yarisleidis Cirilo obtuvo plata en el en C-1 a 200 metros y bronce en el C-1 a 5 000 metros, en tanto José Ramón Pelier ganó bronce en el C-1 a 500 metros.
«En general el torneo resultó fuerte para confirmar que la canoa se mantiene a pesar de todo; para nosotros es confirmación de que nos mantenemos en la élite del mundo y que podemos seguir aspirando a grandes resultados», concluyó.
“Después de estar dos años sin competir, los resultados han sido buenos, y serán mejores en la próxima copa a la que asistiremos en Rusia”, destacó el entrenador de los varones Yosniel Domínguez, desde la sede.
El evento convocó a unos 700 atletas de más de 60 naciones. La próxima parada de los canoístas cubanos será en la Copa del Mundo de Canotaje de Velocidad, prevista del 21 al 23 de mayo en la ciudad rusa de Barnaul.