Los constructores del municipio de Trinidad han dado su decisivo aporte en la lucha contra la COVID-19, atendiendo dos villas de aislamiento, una en playa La Boca y otra radicada en el otrora IPUEC Renán Turiño, sin tener que lamentar contagios hasta la fecha
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Por: Alipio Martínez Romero
Fieles a Fidel quien calificó a los constructores “hombres de honor”, los trabajadores de la Unidad de Servicios de la Construcción en Trinidad muestran su altruismo por el bienestar en el enfrentamiento a la COVID-19.
Este gesto solidario y humano atesora un año y más de siete meses de experiencia, durante los cuales, verdaderamente momentos difíciles, han confirmado sus compromisos con la máxima dirección del país, para ponerle con profundos latidos el corazón a la Patria.
La inquebrantable voluntad de los obreros sureños en la lucha contra la pandemia se manifiesta en los campamentos de playa La Boca y Renán Turiño. Este último recientemente retomó sus labores de albergue y atención a quienes edifican obras económico-sociales entre ellas las del turismo.
De acuerdo con el jefe de la Unidad, Maikel Cobo Rodríguez, el cambio de objeto social constituye un orgullo para los directivos y subordinados con el empeño de contribuir a salvar lo más preciado de las personas.
También Cobo Rodríguez, enfatizó que han sido gratos los reconocimientos de numerosos pacientes recluidos en los dos centros de aislamiento y de sus familiares, reflejados en distintos formatos como en las redes sociales.
De igual modo la entrega humana en la atención a contactos de casos positivos y sospechosos, motiva el agradecimiento de las autoridades políticas, del Gobierno y del Ministerio de Salud Pública en el municipio y la provincia.
Asimismo la emergencia sanitaria en plena zona roja exige adoptar debidamente las medidas de los protocolos para evitar el contagio, cuyo estricto cumplimiento, hasta los momentos actuales, ha impedido que ninguno de los compañeros de las villas, 36 en playa La Boca y los 22 integrantes del equipo de Renán Turiño, contrajeran la enfermedad.
Esta batalla que se libra y se ganará con el concurso de todo el pueblo cubano, se conjuga no solo en el trabajo contra la pandemia, sino además en los desafíos constructivos de obras económicas y de beneficio social.
Sobresale la continuidad del Hotel Meliá en la península de Ancón, las viviendas que se construyen en Hato Viejo, el apoyo de una brigada en la edificación de la nueva sala de hemodiálisis en el Hospital General Doctor Tomás Carrera Galiano de la ciudad y el bacheo de viales, entre otros objetivos.
