Fidel Castro en Sancti Spíritus: En la mira el desarrollo industrial

Fidel intercambia con la dirección de la Fábrica de Cemento Siguaney el 6 de mayo de 1989. Foto: Radio Sancti Spíritus.
Fidel intercambia con la dirección de la Fábrica de Cemento Siguaney el 6 de mayo de 1989. Foto: Radio Sancti Spíritus.

El líder histórico de la Revolución cubana, desaparecido físicamente el 25 de noviembre de 2016, devino artífice de los más importantes programas económicos implementados en Sancti Spíritus y, de manera particular, se interesó por impulsar el sector industrial en un territorio eminentemente agropecuario.

Por: Enrique Ojito Linares

“Fidel veía por los ojos del Uruguay”, manifestó tiempo atrás a Escambray Pedro Sáez Jova, quien fuera jefe del Departamento Termoenergético del central jatiboniquense. Aunque el líder cubano solo visitó el ingenio en una vez (6 de mayo de 1989), siguió sus huellas productivas, diferenciadamente, desde los años 70 y con más detenimiento durante los 80.

En su interés por aprovechar al máximo las reservas cañeras y fabriles del Uruguay, destinó 13 módulos para igual cantidad de brigadas con miras a proseguir la implementación del riego y el drenaje parcelario, que contribuyeron a que el ingenio fabricara 235 079 toneladas de azúcar crudo en 1991, récord nacional para una zafra en Cuba, noticia que, como pocos, disfrutó Fidel.

Sin perder de vista que la rama agropecuaria constituía el eje articulador del perfil económico de la provincia, definió las coordenadas, asimismo, para la industria turística, con epicentro en Trinidad, específicamente, en la península de Ancón; aunque, además, Fidel le brindó particular seguimiento a la proyección y ejecución del hotel Zaza, asegura Joaquín Bernal, entonces primer secretario del Partido en el territorio espirituano.

Casi desde que la Revolución llegó al poder, el Comandante en Jefe consideró imprescindible potenciar la producción de cemento para apuntalar la construcción de viviendas y otros programas sociales y económicos.

En consecuencia, delineó la estrategia, de conjunto con el entonces ministro de Industrias, Comandante Ernesto Guevara, y especialistas en el giro, para ampliar las plantas existentes y construir otras, como la de Siguaney, en Taguasco, erigida gracias a un convenio suscrito en 1962 por el Che con una representación de la desaparecida República Socialista de Checoslovaquia.

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Como “una inyección para el corazón de la fábrica” valoró años atrás Luciano Francisco Hernández, al frente del Buró del Partido en esa fecha, la visita de Fidel a la entidad taguasquense el 17 de septiembre de 1971.

Prácticamente, no hubo rincón del centro que no recorriera; llegó hasta la cantera donde se extraía el material y analizó la escasez de equipamiento. A los pocos días comenzó la entrega de camiones, buldócer, una grúa, equipos para el transporte obrero, incluso, una ambulancia, por indicaciones del mandatario, quien orientó, además, la construcción de un vial desde la Carretera Central (zona de Managuaco) hasta la fábrica para ahorrar combustible.

A Siguaney regresó el 6 de mayo de 1989, cuando la entidad acometía el proceso inversionista para la producción nacional del llamado cemento blanco, con asesoría de una empresa japonesa; de todo lo cual le informó el director en ese tiempo, Armando Santos, ya fallecido, sin olvidar que “el Comandante siempre se mantuvo al tanto de esta industria”, como reconocería después.

Luego de sus intercambios con las autoridades y colectivos obreros espirituanos por varias décadas, Fidel, como arquitecto principal del desarrollo económico de la provincia (algunas de cuyas acciones apenas esbozamos), dejó orientaciones y sugerencias concretas, que valdría revisitar para evaluar su vigencia en los actuales escenarios, pues cada orientación suya solía girar de un modo o de otro en torno al concepto de eficiencia.

Lo ejemplifican sus palabras en el acto central nacional el 26 de julio de 1986, como lo recuerda Joaquín Bernal Camero, quien asevera que Fidel se sintió tan comprometido con el impulso a una serie de proyectos en Sancti Spíritus que, a pesar de haber regresado a La Habana, “siguió metido en la provincia”. (Tomado de Radio Sancti Spíritus).