Por: Joaquín Gómez Serra
La 60 Serie Nacional de la pelota cubana anda y desanda por la recta final del calendario de 75 juegos clasificatorios, y los Gallos continúan persiguiendo a los Alazanes, en una carrera donde los ahijados de Eriel Sánchez se encuentran a sólo medio juego de la cima que comanda Granma.
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Fructífero resultó el periplo de los espirituanos por la tierra de la piña, al acumular par de triunfos que los llevan a acumular 39 sonrisas con sólo 22 descalabros, para reafirmar la convicción de que la clasificación es sólo cuestión de tiempo.
Joyas de pitcheo marcaron el desempeño espirituano en el estadio José Ramón Cepero en predios avileños. Primero, el sábado, José Eduardo Santos se anotó su séptimo triunfo de la campaña con sólo dos derrotas, y salvamento de altos quilates del derecho Pedro Álvarez, para su cuarto puntos por juego salvado.
En el último partido, Socarrás volvió a ser el “caballo de batalla, tras lanzar otro tremendo juegazo, en el que no permitió carreras en siete entradas, en las que admitió cinco hits, ponchó a siete bateadores y regaló un solo boleto en un gran duelo con Luis Alberto Marrero, quien lanzó esa propia cantidad de capítulo y solo permitió, ya en el séptimo inning, cuadrangular de Geisel Cepeda, su segundo de la subserie ante Ciego de Ávila.
Eriel volvió a echarle garra a su “paño de lágrimas”, el derecho Yankiel Mauri quien no pudo preservar la ventaja de una a cero, y permitió en el octavo episodio el empate avileño.
Así todo quedó dispuesto para el alargue y la decisión por regla Shiller. En la parte alta de la décima entrada con los dos corredores en base que permite este sistema, los espirituanos marcaron cuatro, dos de ellas empujadas por Alberto Rodríguez.
Lo del cierre del décimo inning fue otro punto para la defensa, pues la entrada abrió con un doble play, otra vez con Daviel Gómez como protagonista.
Del resto se encargó el “matador” trinitario Yanieski Duardo, quien alcanzó su décimo punto por juego salvado, al tiempo que Mauris consiguió su novena victoria y se ratificó como el máximo ganador del conjunto.La derrota corrió a cargo de Yosvany Ávalos.
Tras 61 partidos de la actual temporada beisbolera, los gallos, bate en mano, promedian para 303, han disparado 113 biangulares, 9 triples y 34 vuelacercas, renglón donde Frederich Cepeda lidera con 8, seguido por Geyser, que tiene seis, mientras Daviel Gómez ha sacado 5 esféricas fuera del parque.
Desde la lomita del diablo, Mauri es el que más gana, con 9, seguido por Socarrás, el mejor abridor, con 8 sonrisas, mientras el hijo de la Villa Patrimonio de la Humanidad, Yanieski Duardo es el mejor relevista con 10 puntos por juegos salvados.
Al staff que dirige como entrenador el otrora estelar Ismel Jiménez, junto al varias veces miembro de equipos Cuba, el derecho Ifreidi Coss, le batean para 277, lanzan para 4.00 carreras limpias cada nueve entradas de labor monticular, su WHIP es de 1.50, y 341 bateadores contrarios han salido por la vía del ponche.
La defensa, aunque es el de menor destaque, lo hace para 971, con 67 errores en dos mil 297 lances. Los de peores desempeños guante en mano son el tercera base, Rodolexis Moreno, con 18, y Daviel Gómez, con 14, y cierran la llave del cuadro Yoandi Baguet, con excelente fildeo de 6 marfiladas, mientras Mendoza ha pifiado sólo 4 veces. El sureño Mendoza lleva, como primera base, 55 dobles matanzas, en un cerrojo del cuadro donde Daviel Gómez acumula 50, y Baguet, 49.
El dueto de los Cepeda son los de mayor ofensiva, con destaque para Frederich (372), mientras Geyser compila 357. Les siguen los pasos, la “regadera” trinitaria Mendoza, con 339, Yoandi Baguet marcha cuarto, con 322, Daviel Gómez, 311, y cierra el selecto grupo de los que batean por encima de los 300, el sureño Rodolexis Moreno, que lo hace para 301.
Tras ganarle el pareo individual a Ciego de Ávila, 4 triunfos ante una derrota, los ahijados del olímpico Eriel Sánchez se montan en la Yutongs y enrumban su paso hacia el Cándido González para enfrentar a los Toros de Camagüey, elenco al que le ganaron en su primer compromiso dos-cero, en los predios del estadio José Antonio Huelga.