Por: Ana Martha Panadés Rodríguez
La actividad turística en el destino Trinidad-Sancti Spíritus sobrevive al nuevo coronavirus, pero no desconoce el impacto de la pandemia que paralizó totalmente las operaciones en determinadas etapas y en otras las redujo a niveles muy bajos.
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El delegado del Ministerio de Turismo, (MINTUR) en el territorio, Reinier Rendón, confirmó el deterioro de los indicadores económicos a partir del decrecimiento en el número de visitantes procedentes de los principales mercados: Italia, España, Alemania, Francia, Canadá y también el segmento nacional, la mayoría con altas tasas de contagios por el virus SARS-CoV-2.
De acuerdo con el directivo, al concluir el año pasado se dejaron de recibir 184 283 turistas físicos comparado con cierre de diciembre del 2019. Hasta el mes de marzo de 2021 se contabilizan 357 mil vacacionistas menos comparados con igual etapa precedente. Esta reducción afecta el resto de las actividades extrahoteleras, tanto en el sector estatal como no estatal.
Pese a la baja operación turística, los trabajadores del sector se mantienen activos en labores de limpieza en los centros de aislamiento, la agricultura, la campaña antivectorial, además de la elaboración y oferta de productos a la población en la ciudad, las comunidades rurales y en las áreas con restricción de movimiento.
Durante todos estos meses y como alternativa para generar ingresos y satisfacer demandas de la población, se incrementa la oferta de productos, sobre todo de comidas elaboradas, gracias al apoyo del Grupo Palmares, la Sucursal Caracol y las agencias Cubanacán e Islazul. Estas opciones llegan también a las comunidades rurales del territorio y las áreas con restricción de movimiento debido a casos positivos del nuevo coronavirus.