Por: Juan Carlos Naranjo
El programa nacional de la vivienda, una de las políticas priorizadas del país, exige calidad en la terminación lo cual se materializa en Trinidad con la certificación de cada inmueble, antes de concederle la condición de habitable.
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“Las viviendas estatales, es decir, las que hacemos con las empresas, son sometidas a una rigurosa inspección por parte de especialistas del Ministerio de la Construcción y nos señalan cualquier tipo de detalle, que imposibilita la entrega”.
Así lo explicó Grisell Sesmonde Cama, viceintendente de Trinidad quien enumera requisitos para declarar habitable una casa:
“En cuanto a las células básicas también reforzamos la calidad en la entrega, de hecho si la vivienda no reúne los requisitos indispensables para el otorgamiento de la condición de habitable no se pueden entregar y no las estamos entregando”, y agregó: “Se exige un baño, una cocina y una fosa totalmente terminada, toda repellada, pintada y los pisos bien hechos, la electricidad con sus metrocontadores y agua potable”, manifestó.
Es la manera de desterrar un viejo problema que ha venido generando insatisfacciones en los moradores que con frecuencia se lamentan de la chapucería y los trabajos sin concluir, cuyas causas principales han sido el desvío de materiales y el poco seguimiento a las obras. En el primer semestre del 2021 reporta atrasos el plan general de terminación de viviendas en Trinidad, en el cual se labora con la búsqueda de alternativas, para cumplir lo pactado antes del cierre del año.