Prueba de las oportunidades legislativas favorables al mejoramiento humano y de la calidad de vida ciudadana, fue el proceso del sufragio del anteproyecto Ley del Código de las Familias en Trinidad de Cuba
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Por: Alipio Martínez Romero
Así se suscitó en los 170 colegios de los 13 Consejos Populares donde sus autoridades electorales cumplieron el encargo conforme a la voluntad revolucionaria de hacer más placentera en la nación la convivencia humana.
Previo al referendo por el Código de los afectos en Trinidad se capacitaron a las personas con experiencia o no en esta responsabilidad de cumplir de manera eficiente con el ejercicio de carácter democrático y participativo.
Aunque el voto por los derechos solidarios y soberanos, el altruismo por los demás sumó objeciones, dado a los aspectos sensibles y también polémicos del texto, desde la consulta popular el protagonismo del Sí sobrepasó los intentos negativos con el propósito de ser menos egoístas y más sinceros en apuesta por la igualdad social y un futuro mejor.
Desde este histórico 25 de septiembre en apego al país, en cuyo espejo queremos vernos reflejados hoy y mañana, plenos de la unión y sentimientos de amor, tendrá una mirada distinta e inclusiva al ser enriquecido con todos y para el bien de todos, con los latidos del corazón como siempre soñaron y nos han convocado en sus doctrinas los próceres forjadores.